La nueva ley sobre el aborto en Texas ofrece recompensas a quienes denuncien casos después de seis semanas de gestación
Una ley de Texas que prohíbe el aborto después de seis semanas de gestación, antes de que muchas mujeres sepan que están embarazadas, entró en vigor este miércoles en ese estado estadunidense, después de que la Corte Suprema no se pronunció ante una solicitud de emergencia para frenarla.
El gobernador republicano Greg Abbott firmó el proyecto de ley en mayo, haciendo ingresar a Texas en la lista de una docena de estados que prohíben el aborto una vez que se puede detectar un latido fetal, lo cual suele darse alrededor de la sexta semana de embarazo.
El llamado ‘proyecto de ley del latido del corazón’ no hace excepciones para la violación o el incesto y convierte a Texas uno de los estados del país donde abortar será más difícil.
La Corte Suprema aún puede aceptar el reclamo de organizaciones de defensa de los derechos civiles y otros grupos, entre ellos la asociación Unión Estadunidense de Libertades Civiles (ACLU) y Planned Parenthood, el Centro de Derechos Reproductivos.
Aproximadamente, entre el 85 y el 90% de las personas que se someten a un aborto en Texas tiene al menos seis semanas de embarazo, lo que significa que esta ley prohibiría casi todos los abortos en el estado», protestó la ACLU.
Otros estados que han tratado de promulgar restricciones sobre el aborto en las primeras etapas del embarazo no han podido hacerlo por el fallo histórico de 1973 de la Corte Suprema Roe vs Wade.
Esa decisión permitió el aborto mientras el feto no sea viable, lo que suele ocurrir hacia las semanas 22 a 24 de embarazo.
‘Cazarrecompensas’
La ley de Texas es diferente porque permite a los ciudadanos, en lugar de a los funcionarios estatales como los fiscales o los departamentos de salud, hacer cumplir la prohibición.
Esta iniciativa «crea un esquema de caza de recompensas que alienta al público en general a entablar demandas contra cualquiera que crea que ha violado la prohibición», indicó la ACLU.
Cualquiera que demande con éxito a un trabajador de un centro de salud, un proveedor de servicios de aborto o cualquier persona que ayude a alguien a acceder a un aborto después de seis semanas será recompensado con al menos 10 mil dólares, pagados por la persona demandada», explicó.
La Corte Suprema debe ocuparse en las próximas semanas de un caso que se refiere a una ley del estado de Mississippi que prohíbe los abortos después de la semana 15 de embarazo, excepto en casos de emergencia médica o una anomalía fetal grave.
Será el primer caso sobre aborto considerado por el máximo tribunal de la nación desde que el expresidente republicano Donald Trump consolidó una mayoría conservadora en el panel de nueve miembros.