El 96% de las mujeres sufren violencia en el transporte público: Inmujeres
La violencia y el acoso sexual son algunas de las situaciones con las que el 96% de las mujeres mexicanas han tenido que lidiar al usar el transporte público, así lo revela un estudio realizado por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
Es por ello que el instituto realizó un programa piloto de nuevos lineamientos para prevenir estas violencias en tres ciudades capitales: Ciudad de México; La Paz, en Baja California Sur, y Manzanillo, en el estado de Colima, mediante la capacitación de conductores, la distribución de materiales que apelan a describir y definir el acoso como un delito, así como acciones de difusión y coordinación en torno a las consecuencias que debe enfrentar quien lo comete.
El diagnóstico del Inmujeres señala que las mujeres se mueven más en transporte público y caminando, casi 10% más que los hombres quienes se movilizan en vehículos particulares, transporte personal o en bicicleta.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE, 2021), las mujeres perciben una alta inseguridad en el transporte público (73.8%), la calle (69.5%) y en espacios públicos como parques (60.4%).
Los diferentes tipos de acoso en el transporte público que viven las mujeres son: silbidos, besos, gestos con la mano, expresiones, sonidos, toqueteos, alusiones personales, sexuales, directas o indirectas al cuerpo, miradas lascivas e insinuantes, arrinconamiento en vehículos, bloqueo del paso o acciones grupales y fotografías sin su consentimiento, hasta intimidación y acoso verbal, masturbación, exhibicionismo, acecho y persecución de la víctima fuera de la zona del transporte público.
En entrevista con medios, Nadine Gasman, titular de Inmujeres, destacó que la manera en la que utilizan el transporte público y el espacio público hombres y mujeres es distinta.
» (…) El hombre, en general, va de su casa al trabajo o de su casa a estudiar, y la mujer va de su casa a la guardería, de la guardería al trabajo, del trabajo a la tienda, de la tienda a la guardería y a su casa… Entonces, el uso del transporte público es muy diferente, nosotras lo usamos más”, dijo.
Resaltó que casi ninguna mujer se siente segura al usar el transporte público.
“Es una experiencia, casi de todas, de que no es un espacio donde nos sentimos seguras, donde casi todas han vivido en algún momento acoso, donde también se normaliza, como que estás ahí y los hombres que están ahí pueden decirte lo que quieran, pegarse, manosearte, etcétera… Ante esta vivencia que tienen muchísimas mujeres, decidimos que había que hacer algo”, señaló.
Ante esta situación es que el Inmujeres decidió poner en marcha el programa de sensibilización con la finalidad de desarrollar una cultura del respeto y garantizar la coordinación institucional entre concesionarios, operadoras y mecanismos para las mujeres.
Para ello se plantean como condiciones fundamentales los mapeos de trayecto, el registro de personas conductoras, así como canales de comunicación para supervisar y dar seguimiento a los casos.
En el marco del 20 aniversario de la creación del Inmujeres, el Instituto determinó que las tres principales problemáticas que las mujeres enfrentan en México son la falta de autonomía económica, la sobrecarga en el trabajo de cuidados y la violencia.
Pero además, las mujeres en mayores condiciones de vulnerabilidad son las jóvenes indígenas y las afromexicanas.