Tono de piel determina la calidad de vida en México: CEEY

Ciudad de México.– El tono de piel sigue marcando el destino de millones de mexicanos. Así lo revela el Informe de Movilidad Social 2025, presentado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), donde se advierte que nacer con piel más oscura limita de manera significativa las oportunidades de educación, empleo y bienestar.

El estudio confirma que la mitad de las personas que nacen en pobreza mueren en la misma condición, sin lograr ascender en la escala socioeconómica. Pero el impacto no es igual para todos: el 57% de quienes tienen piel oscura permanecen pobres, frente a un 34% de quienes tienen piel clara.

En el extremo contrario, el 54% de las personas con piel clara que nacen en hogares acomodados conservan ese estatus, mientras que solo el 42% de las personas con piel oscura logra mantenerse en los niveles más altos de ingresos.

Mujeres, las más afectadas

La desigualdad se profundiza en las mujeres. El informe señala que seis de cada diez mujeres de piel oscura permanecen en la pobreza intergeneracional, contra solo tres de cada diez mujeres con piel clara. Y cuando se trata de conservar posiciones privilegiadas, las mujeres de piel oscura lo logran en apenas un 39% de los casos, frente al 59% de los hombres con piel clara.

Un reflejo del racismo estructural

Para el CEEY, los datos confirman que el colorismo —la discriminación basada en el tono de piel— sigue siendo una barrera estructural en México. “La movilidad social no solo depende del esfuerzo individual, sino de condiciones históricas y culturales que favorecen a ciertos grupos sobre otros”, advirtió la institución.

El organismo subrayó que mientras los mexicanos de piel clara cuentan con más acceso a estudios universitarios y empleos mejor remunerados, quienes tienen piel más oscura enfrentan obstáculos desde la infancia, lo que perpetúa la desigualdad de generación en generación.

Retos pendientes

El CEEY hizo un llamado a fortalecer las políticas públicas de inclusión y equidad, enfocadas en combatir la discriminación estructural y garantizar igualdad de oportunidades para todos los mexicanos, sin importar su origen ni el tono de su piel.

“México no podrá aspirar a un verdadero desarrollo mientras la herencia del color de piel siga determinando quién puede prosperar y quién no”, concluyó el informe.