Miles de camellos serán sacrificados por falta de agua en Australia
Autoridades de Australia han dado luz verde a francotiradores profesionales para disparar contra los camellos salvajes desde helicópteros, en una operación que, se estima, se prolongará durante al menos cinco días.
Según un comunicado del Comité Ejecutivo de la reserva de Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara (APY) los pueblos aborígenes se han visto “incapaces de gestionar la magnitud del número de camellos que se congregan (alrededor de las fuentes de agua) en condiciones de sequía”, con lo que están poniendo en peligro a las comunidades del desierto, durante una de las peores épocas secas que se vive en el país.
Según el portal Camelscan, en Australia hay hasta 1.2 millones de camellos salvajes, cuya población se duplica cada 9 años, habitan una extensión de 3.3 millones de kilómetros cuadrados, mismos que, se estima, provocan daños económicos anuales de unos 10 millones de dólares australianos.
Adicional a esto, hasta unos 10 mil camellos en estado salvaje acuden a las fuentes de agua de las que disponen las poblaciones aborígenes de la zona, por lo que dañan sus infraestructuras y ponen en peligro a las familias y comunidades, además de competir con el ganado y ellos mismos, lo que también representa un problema.
“En algunos casos, los cadáveres de los animales han contaminado importantes fuentes de agua y zonas culturales”, señala el comunicado del Ministerio.
Finalmente, el gerente de Tierras de los APY, Richard King, detalló a ABC que aprovecharán el momento en que los camellos se acerquen al agua para matarlos; “Eso nos brinda una oportunidad para cazarlos cuando están todos juntos, porque normalmente se desplazan por el desierto en manadas más pequeñas”, precisó.