Ciudad de México, 26 de agosto de 2025 – La tasa de desocupación en México se ubicó en 2.7% durante el segundo trimestre del año (abril-junio), un ligero aumento frente al 2.5% reportado en los primeros meses de 2025, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI.
El incremento obedece al crecimiento de la Población Económicamente Activa (PEA), que sumó 61.1 millones de personas, es decir, 573 mil 770 más que en el trimestre anterior. De esta cifra, 59.4 millones se encuentran ocupadas, mientras que la población desocupada ascendió a 1.6 millones, con un aumento de 134 mil personas.
Servicios y campo, los motores del empleo
La creación de empleos se concentró en el sector servicios, que aportó 212 mil 554 plazas, principalmente en comercio (117 mil 561), transportes y almacenamiento (39 mil 634), y servicios financieros y profesionales (28 mil 55).
El sector primario también tuvo un desempeño positivo con 156 mil 99 nuevos empleos, mientras que en el sector industrial se añadieron 32 mil 227, gracias al dinamismo de la manufactura (+46 mil 763). En contraste, la construcción perdió 15 mil 934 empleos.
La otra cara: más empleos, pero informales
A pesar de que la ocupación aumentó, la calidad del empleo se deterioró. Los puestos formales cayeron en 106 mil 598, mientras que la informalidad laboral subió a 54.8%, el nivel más alto desde 2023, lo que equivale a 32.6 millones de personas en condiciones sin acceso a seguridad social ni derechos laborales.
La subocupación —trabajadores que desean laborar más horas— también creció y se situó en 7.2%, lo que representa 4.3 millones de personas en esta situación.
Panorama mixto
El repunte del desempleo muestra que, aunque más mexicanos buscan integrarse al mercado laboral, gran parte lo hace en condiciones precarias. El dinamismo de servicios y el campo contrasta con la fragilidad del empleo formal y la persistencia de la informalidad, lo que refleja las contradicciones del mercado laboral mexicano.