Descubren pirámides ocultas en México de una ciudad maya perdida
En 2023, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) empleó tecnología LiDAR para revelar la existencia de una ciudad maya perdida conocida como Ocomtún. Un año después, los arqueólogos han hecho otro hallazgo significativo en las cercanías, específicamente en la Reserva de la Biosfera Balam Kú.
Entre las nuevas revelaciones se encuentran impresionantes pirámides y un centro cívico-ceremonial, así como una estructura subterránea situada debajo de un juego de pelota maya.
Es importante destacar que este descubrimiento se enmarca dentro de los esfuerzos arqueológicos en el centro de Campeche. La zona explorada cuenta con áreas de baja altitud donde el agua fluye de manera intermitente, además de elevaciones con terrenos rocosos y suelos delgados.
El equipo del INAH considera que, debido a estas características, la población en esta región fue escasa en el pasado, ya que no ofrecía condiciones adecuadas para la agricultura.
Encontraron una pirámide
Desde el INAH informaron que uno de los hallazgos más destacados en el área es una pirámide de 16 metros de altura, situada cerca de un reservorio de agua. En la parte superior de esta estructura se encontraron restos de ofrendas, que incluyen fragmentos de cerámica, una punta de pedernal y la extremidad de un animal, posiblemente un armadillo o un roedor grande.
La tecnología LiDAR (Light Detection and Ranging) ha transformado la arqueología, ya que anteriormente los arqueólogos solo podían explorar áreas limitadas a pie, lo que era un proceso largo y obstaculizado por la vegetación y el terreno. Gracias a esta innovadora técnica, se han descubierto nuevos elementos de la civilización maya.
Los hallazgos están vinculados al período Posclásico Tardío, que abarca aproximadamente desde 1250 hasta 1524 d.C., lo que sugiere que la región permaneció habitada incluso tras el declive de la civilización maya, antes de la llegada de los españoles. El terreno de este enclave en México presenta características que dificultan su cultivo, lo que ha resultado en una menor cantidad de asentamientos y estructuras antiguas en comparación con otras áreas mayas.
Este descubrimiento del INAH resalta las diferencias culturales y de desarrollo entre las diversas regiones habitadas por los mayas, mostrando que los sitios hallados en esta zona presentan un estilo más sencillo, con escasa ornamentación arquitectónica y grabados mínimos. Esto proporciona una nueva perspectiva sobre la diversidad y adaptación de esta antigua civilización.